El concepto de motivación dentro del entorno organizacional apela a las necesidades, deseos, anhelos que mueven a las personas desde adentro. Es un aspecto de gran importancia ya que conduce al rendimiento no solo del empleado en particular, sino del departamento y de la empresa. Resulta importante entonces comprender la importancia de la motivación para los empleados para que puedan desarrollar su potencial y lograr los objetivos. Para ello, se necesita diseñar procesos que inspiren a las personas, actividades y estrategias que establezcan un punto de partida para la consecución de metas laborales y que apelen a factores psicológicos que inciden en el comportamiento de las personas, como: satisfacción laboral, logro, necesidad económica, respeto, entre otros.
El rol del líder es despertar el interés de los empleados con la presentación de su rendimiento, y desde la administración corresponde crear entusiasmo entre el talento humano para ejecutar las tareas de la mejor forma atendiendo a sus capacidades. Para implementar una estrategia de motivación efectiva se deben considerar tres etapas:
- Estímulo: sentir la necesidad. Se trata de la motivación basada en un sentimiento emocional que puede ser tanto positiva como negativa. Es aquella que da el empuje al deseo, a esa ráfaga de energía que nos lleva a hacer cosas. Sin embargo, esta ráfaga no es sostenible a largo plazo porque se desvanece.
- Motivación interna: Aquella que detona algo que ya existe dentro de los sujetos. Toda acción positiva o negativa que hacemos tiene algún tipo de motivación interna que lo respalda. Para sacarle provecho, se debe crear una conciencia de hacia dónde dirige la motivación. Reconocer los factores desencadenantes de nuestro proceder, ayudará a enfocar la motivación hacia metas positivas.
- Significado: Se trata de una etapa de mayor profundidad en que se identifica el significado tras la llama inicial del deseo. A través de diferentes recursos se identifica el sentido de las acciones que queremos desarrollar. Es el punto que nos lleva a la acción como respuesta a los momentos anteriores.
- Satisfacción de la consecución de metas. Luego de la puesta en marcha de la acción, en esta etapa se logran los objetivos. El tiempo y la forma en que se logre responder a la necesidad, a esas metas planteadas, dependerá de la personalidad, carácter y ritmo de trabajo, pero se trata de la confirmación del cumplimiento de los objetivos. Esto genera a la vez un estado de satisfacción por los logros alcanzados, que al volver a la rutina de trabajo, permite que los sujetos se sientan más comprometidos a mejorar aquellos puntos que al inicio del ciclo no funcionaban.
Se trata de cuatro momentos importantes a considerar al momento de diseñar una estrategia de motivación dentro de las organizaciones. Algunas dinámicas que pueden implementarse dentro de las actividades de la empresa para potenciar el talento del equipo a través de la motivación son:
Incentivos. Los incentivos como potenciadores impulsan la motivación de los empleados al ofrecerles mayores beneficios por los que luchar. Existen varios tipos, desde incentivos pagos como tiempo libre pagado, bonos, efectivo, etc., hasta no pagos que satisfacen necesidades emocionales y psicológicas tales como la seguridad del puesto de trabajo, el reconocimiento, enriquecimiento de las características laborales, oportunidades de promoción. Frecuentemente se cae en el error de pensar que sólo son aplicables para departamentos relacionados a ventas, sin embargo, como estrategia, impacta considerablemente la cultura corporativa y conduce a comportamientos favorables para las organizaciones. Cabe resaltar que los incentivos que no son de efectivo pueden proveer a las compañías de la habilidad de enfocar la atención en un objetivo y luego en otro sin incidir negativamente en las expectativas de ingresos.
Reconocimiento y agradecimientos. La motivación a través del reconocimiento y el agradecimiento refuerza el desempeño del empleado asegurando con ello la productividad de la organización. Existen diversas formas para implementarla, pero suele ser de las estrategias más sencillas y menos costosas para motivar a los miembros del equipo de trabajo. El desarrollar actividades de intercambio como picnics, brindis, etc., y competencias interdepartamentales puede ser efectivo, pero a largo plazo, puede ser mucho más eficaz, resaltar los esfuerzos realizados, sobre todo en jornadas intensas, agradecer por la colaboración. Así mismo, el reconocer un trabajo bien hecho hace que los empleados se sientan bien y los alienta a hacer cosas buenas. Como líderes de organizaciones, el reconocimiento del talento humano implica hacer un seguimiento del progreso y proporcionar comentarios sobre cómo han mejorado con el tiempo.
Ambiente positivo. Ya se ha probado la influencia del ambiente laboral en el desempeño de cada empleado. Si todos están inspirados y con muchas ganas de trabajar, recibir el reconocimiento por sí mismos, el entorno en el lugar de trabajo definitivamente será efectivo y positivo. El lograr que ya todos de manera personal se preocupen por lograr los objetivos y seguir la visión de la empresa se trata de una energía contagiosa que favorece la motivación en los momentos de inquietud. Así mismo, de no encontrar personas que se encuentren direccionados en este sentido los hará mucho más propensos a buscar otras empresas o equipos de trabajo que sean inspiradores o en dónde se fomente el trabajo en equipo.
Desarrollo profesional. El avance en la carrera profesional aumenta las probabilidades de que los empleados trabajen arduamente por alcanzar el éxito. Desde la administración de la organización desarrollando iniciativas de formación y aprendizaje, así como creando oportunidades, puedes mantener esta motivación asegurándose de que haya promoción en las posiciones de trabajo para que exista un avance. Este tipo de iniciativas les permite saber que son valorados y los hace más comprometidos con sus posiciones.
Resulta importante analizar y pensar nuevas formas de implementar una estructura que potencie la motivación de manera continua dentro de la organización, ya que un equipo motivado logra rendir al máximo y es una parte clave para el crecimiento y desarrollo del negocio. El entender tanto las etapas por las que pasas como sujetos para llevarnos a la acción, así como los recursos estratégicos para fomentar la motivación incide positivamente en el desempeño en niveles más altos, en el aumento del rendimiento general de la empresa.