Identificar tu modelo de negocio contribuirá con una mejor gestión
Uno de los errores más comunes entre los emprendedores es no tener claro la diferencia entre una startup y una pyme, lo que interfiere con el diseño de estrategias adecuadas para el modelo de negocio.
Si bien es cierto que algunos principios básicos de la startup se pueden aplicar a la pequeña y mediana empresa, el concepto no es el mismo. La startup es una empresa que desarrolla un producto o servicio enfocado en la innovación y la tecnología, por lo que no se puede gestionar con métodos y estándares de las empresas tradicionales.
Por otro lado, la pyme posee un modelo de negocio tradicional que se enfoca en la rentabilidad mientras suple las necesidades del cliente. A continuación, te compartimos cinco diferencias claves entre una startup y una pyme:
- La innovación y la tecnología es la esencia de las startups, al contrario de las pymes. Sin embargo, en la actualidad estos dos elementos esenciales se están incorporando al modelo de negocio tradicional para garantizar su permanencia en el mercado.
- Las startups poseen un desarrollo y crecimiento a una velocidad exponencial, a diferencia de las pymes, que su crecimiento es paulatino y lineal.
- Estos dos modelos de negocio poseen un enfoque diferente. Por ejemplo, las pymes, por lo general, están enfocadas en el mercado local, contrario a la startup, que tiene un rango de alcance más amplio geográficamente.
- El nivel de riesgo de la pyme es mucho menor comparado con el de las startups, debido a que esta última apuesta al “todo o nada” para dominar el mercado.
- Mientras la pyme requiere de menos inversión o financiamiento para iniciar, la startup necesita de una mayor inversión de terceros para poder alcanzar sus objetivos.
