Una empresa inclusiva es aquella que fomenta la inclusión laboral y social de personas con algún tipo de discapacidad.
El deseo de hacer que la empresa que diriges pueda transformarse en una organización inclusiva es el primer paso para movilizar a todo tu personal y gestionar las decisiones y los recursos necesarios para hacer que esto se vuelva una realidad.
La Organización Internacional de Trabajo (OIT) explica que “incluir a trabajadores con discapacidad dentro de una organización puede generar un impacto muy positivo en la empresa. Mejora la reputación corporativa, promueve el trabajo en equipo, posibilita un compromiso mayor con los valores y a aceptar la diversidad”.
La inclusión de estas personas en el mercado laboral tiene múltiples beneficios:
- Crean un entorno de diversidad.
- Influyen positivamente en la moral y en la atmósfera en su lugar de trabajo, mejorando la atención de los clientes y generando nuevas visiones del negocio.
- Elevan el nivel de compromiso de los colaboradores que los rodean, disminuyendo la rotación de personal en los equipos.
- Mejora la reputación corporativa, la imagen se ve impactada positivamente fuera y dentro del mercado.
Desde Impulsa Popular te aconsejamos seguir los siguientes pasos para que tu empresa sea inclusiva.
- Formaliza una política de inclusión.
- Abre las puertas de tu empresa para que estas personas se puedan desarrollar en un ambiente laboral igual que las demás.
- Utiliza todas las habilidades, conocimiento y entusiasmo que demuestran.
- Es relevante dar a conocer a toda la organización que ya cuentan con una política de inclusión laboral para personas con discapacidad.
- Explica a través de canales de comunicación interna acciones concretas que puedan efectuar los colaboradores, como también solicitarles ideas para apoyar el proceso de integración y aceptación de las personas con discapacidades.
Integrar la política a los procesos de selección, reclutamiento y desarrollo profesional en la empresa es crucial para darle continuidad a esta iniciativa que la política se vincule formalmente a los procesos de selección, reclutamiento y desarrollo profesional de la persona con discapacidad en la organización. De esta forma, se potencia y fomenta la estabilización de la inclusión en la empresa.