La formación a través de plataformas virtuales se ha convertido en una estrategia sumamente efectiva, dando la oportunidad de acceder a una rica variedad de programas con los que podemos actualizarnos, intercambiar y desarrollar nuestras capacidades sin tener que desplazarnos o estar de forma rigurosa en un horario y lugar establecido. Otorga flexibilidad, y precisamente este entre otros factores son los que debemos de tener en cuenta para hacer que los programas de formación que tomemos en línea sean mucho más efectivos.
- Existen todo tipo de programas de formación en diferentes áreas que pueden ser de nuestro interés. Antes incluso de buscar, debemos definir cuáles son nuestras debilidades, puntos a fortalecer o visión a futuro de nuestra profesión para tener mayor claridad al momento de acercarnos a la amplia oferta formativa que podemos encontrar hoy en día. En ocasiones, dependiendo del programa y los recursos que utilicen, el aprendizaje será doble, ya que debemos adiestrarnos no solo en el contenido del curso, sino también en las herramientas y plataformas de las que hagamos uso en el transcurso. Así que, si queremos tener un mayor conocimiento de la diversidad de técnicas o preferimos herramientas más conocidas pero mayor énfasis en el contenido, son aspectos a tener en cuenta al momento de evaluar opciones. Incluso, podemos encontrar cursos online que nos ayudan a comprender mejor los recursos específicos y la lógica de funcionamiento del aprendizaje virtual.
- Si bien no es necesario al tomar un curso virtual el estar presentes en un aula, tomando las riendas del momento y lugar en que accedemos a los recursos formativos, debemos ser conscientes que de todas formas requiere dedicación. El lograr resultados de forma efectiva solo se dará si le dedicamos una cantidad considerable de tiempo para completar las actividades programadas, revisar los materiales y estar activos en los espacios de intercambio. Desarrollar la capacidad de gestión del tiempo y la disciplina para ser constantes es un aspecto esencial que se traduce en resultados.
- Recursos técnicos. Si, el e-learning o el aprendizaje online puede ser mucho más accesible que ciertos programas que implican desplazamientos, adquisición de ciertos materiales impresos, etc. Sin embargo, existen algunos procesos y requerimientos esenciales para poder iniciar. Por ejemplo, entre pasas previos podríamos mencionar tener un correo de registro para los fines, o en su defecto, un usuario y contraseña para acceder a la plataforma virtual que debe emitirnos la institución antes de iniciar con el curso, o que debemos solicitar desde la plataforma web. Así mismo, requiere de equipamiento como computador (bien sea de escritorio o portátil) con acceso al internet. En los últimos años, estos se ven con frecuencia sustituidos por tabletas y móviles, pero dependerá mayormente de las características y capacidad de estos de mostrar los contenidos claramente. Sobre el software, generalmente los cursos requieren de recursos adicionales de software como reproductores de video y sonido, procesadores de palabras, reproductores de flash, java y lectores PDF. En algunos casos es probable que necesite equipo o software adicionales por lo que resulta de gran importancia analizar lo dispuesto en recursos.
- Preparación. Bien sea que tomemos el curso desde casa, desde un centro de internet o desde un café, debemos encontrar un espacio calmado, organizado y tranquilo. En ocasiones, una de las mayores preocupaciones es encontrar un lugar libre de distracciones, pero que cuente también con una buena señal de internet. Se trata de un aspecto importante que debemos considerar antes de iniciar la preparación, ya que varias investigaciones han afirmado la incidencia que tiene el espacio en el proceso de aprendizaje. Por otro lado, otros puntos a tener en cuenta antes de comenzar es el de revisar los contenidos del programa y materiales a los que se tengan acceso antes de iniciar el curso. Desde ver el contenido, explorar la plataforma y herramientas de las que dispondremos, etc., ya que de esta forma estaremos familiarizados con ellas antes de iniciar las clases y con fechas de entrega.
- Si bien puede resultar más sencillo, mientras se hace un programa e-learning desarrollar otras actividades simultáneas es una acción que debemos evitar. El primer aprendizaje que debemos tener es evitar las multitareas y concentrarnos en el curso manteniendo el enfoque. Podemos tomar descansos, relajarnos un poco entre tareas, o aprovechar los recesos para hacer algún pendiente, pero no intentar hacerlo todo al mismo tiempo.
- El participar de forma activa en foros, chats o videoconferencias nos permitirá tener un mayor aprendizaje, además de que, en cierta forma nos obliga a desarrollar de forma más eficaz los ejercicios para poder compartirlos así como nos aclara las dudas que podamos tener al respecto. En este sentido, en el e-learning podemos tener tanto como aportamos. Tomar notas de las ideas esenciales o de las mayores inquietudes nos ayuda a reafirmar la información y a una mejor retención de la misma. Si necesitas releer o visualizar exposiciones de audiovisuales nuevamente aprovecha la plataforma. De igual modo, el compartirlas y discutirlas con compañeros afianza el conocimiento y le aporta otras perspectivas. Se deben aprovechar también las ocasiones en que se tenga interacción con el instructor, y para ello resulta conveniente tener a mano las inquietudes más relevantes que no se hayan podido aclarar en espacios de discusión.