No hay una respuesta única para esta interrogante, más bien todo va a depender del uso que le vayas a dar y del espacio que tengas disponible para colocarlo. Ambos aparatos tienen sus ventajas y sus desventajas, mira a continuación.
El mantenimiento de un ordenador de escritorio es más bajo que el de un portátil, por eso, si tienes suficiente espacio físico y no necesitas movilidad, esta sería tu mejor opción.
Si tus empleados tienen constante movilidad, asisten a otras filiales, visitan clientes o tienen reuniones fuera de la oficia, la portátil sería la mejor decisión.
Si cuentas con mucho espacio en tu planta física, te sugerimos que te inclines por un ordenador. Es más confortable y su mantenimiento es más económico.
En cuanto al desempeño, los ordenadores de mesa duran más tiempo, tienen más capacidad y son más potentes. Por el lado de los precios, ambos aparatos suelen tener costo similar.
Muchas empresas están optando por la consumerización, que es darle la libertad al empleado de que utilice su propio equipo. La ventaja es que la empresa no tiene ningún costo con la adquisición de equipos y el empleado se siente más cómodo trabajando con su máquina. El problema de esto es la seguridad, es decir que se filtren temas laborales en esos equipos.
“La tecnología ha impactado directamente en la forma en que trabajan las personas. Este comportamiento exige un cambio de postura de las empresas, tanto en el sentido de crear políticas flexibles para atender a los profesionales como en relación a garantizar la seguridad de las informaciones”, señala Raymundo Peixoto, presidente de Dell Brasil.