El Internet ha revolucionado la comunicación y el comercio. Para las PYME ya es indispensable tener presencia en la “red de redes”, y aunque muchas saben que este puede ser un recurso esencial para estar a la par con la competencia, todavía desconocen ciertas reglas básicas sobre la elección y el registro de los nombres en la web. Al respecto, ten en cuenta estos consejos:
Empieza por el nombre
Antes de registrar tu empresa debes tener claro cómo se llamará. Evita poner números en el nombre y ten en cuenta la actividad que representará, de manera que su denominación transmita lo que ofrece el negocio.
Un “nombre premium” no debe tener más de seis caracteres y deben ser de fácil recuerdo. Pero si no encuentras un nombre que cumpla con este concepto, no te preocupes. Siempre puedes ampliar el número de caracteres, incluso jugar con dos palabras.
Comprueba los dominios
Una vez que tengas la lista de los posibles nombres para tu PYME, el siguiente paso es comprobar su disponibilidad en los registros de los principales dominios de Internet. Normalmente, se comprueban en primera instancia los “.es” y los genéricos, “.com”
Si el nombre que elegiste no está disponible, olvídalo. Busca otro. Cuando tengas un nombre que sea válido, regístralo. Hazlo tanto en los dominios “.es”, “.com” , “.net” y “.org”.
Revisa el nombre en las redes sociales
Definido y registrado el nombre, comprueba su disponibilidad en las redes sociales. Utiliza el portal “Namechk” para este fin.
Sé dueño de la única marca comercial
Es fundamental comprobar que no haya otra marca comercial igual que la tuya, porque es lo que realmente te representa e interesa a los clientes.
Tu presencia en internet debe mostrar que puedes ofertar algo nuevo a los usuarios, que tu producto o servicio no es igual al de otras empresas ya existentes en la web. Los clientes quieren calidad, buen servicio, rápida respuestas, entonces está en tus manos brindárselo.