Mantener protegida la marca de tu empresa debe ser una de tus principales prioridades pues esta representa la identidad y la esencia de la empresa misma.
El fraude, los robos, las estafas y la piratería, son actos tan comunes en la sociedad actual que su hechura ya no sorprende. Y para desventaja de las PYME, el sector empresarial no está exento de ninguno de ellos.
La usurpación se da en todos los niveles empresariales, pero en lo últimos días el más habitual es el que se está produciendo a nivel online. Ocurre cuando una empresa o un usuario de forma consciente engaña a los usuarios y se hace pasar por la marca.
Nadie está a salvo de ser víctima de esta práctica. Aunque hay quienes piensan que solo las personas famosas están expuestas. Cada vez son más los casos de suplantación de identidad denunciados por ciudadanos anónimos.
Por esta razón, es de suma importancia que el nombre de la marca se cuide y se registre legalmente para que nadie lo usurpe. ¿Pero por qué lo hacen?
Las razones son varias: primero, obtener éxito para su propia empresa a través de la disminución de la otra, con el fin de ganar notoriedad y conocimiento de marca. Segundo, para querer adquirir información confidencial de forma fraudulenta, desde contraseñas hasta informaciones bancarias.
Entonces ¿Qué puedo hacer? Si la usurpación es en Facebook el usuario puede referirse a la opción de la página que maneja los casos de derechos de propiedad o a la “VanityURL” que utiliza. Además, puede contratar empresas como Naming Digital y Claim.io encargadas de monitorear el reclamo de identidades. En caso de que la cuenta fraudulenta se aprovecha de la imagen corporativa, la pagina toma medidas al respecto.
En el caso de Twitter también se puede acudir a un formulario que proporciona la página. En el formulario se solicitan datos sobre la compañía y el perfil del que se acusa. Luego, se ponen en contacto con el usuario que utiliza la cuenta y si efectivamente el usuario está usurpando se le retira de la red social.
Las denuncias en YouTube y Google+, funcionan de manera muy parecida. En caso de que el usurpante no esté utilizando información personal del afectado, la única acción que tiene es avisar a la red social. Pero si utiliza información personal como por ejemplo una foto se puede denunciar, ya que está violando el derecho de privacidad.