La venta es la culminación de un proceso que requiere, por parte del vendedor, una seducción previa del cliente. Cuando un usuario decide cerrar una venta es porque está convencido de que debe adquirir el producto o servicio, porque puede efectuar la compra en ese momento y porque lo quiere hacer con tu empresa.
Ahora bien, te has preguntado ¿qué tan fácil o difícil se le hace a tus vendedores elevar los niveles de ventas de la compañía?
Como respuesta a esta interrogante, hemos querido compartir contigo algunas claves para que tu equipo de ventas mejore sus cierres de ventas.
1. Visualiza el camino completo y el punto de llegada. No le des prioridad solo a la venta, por el contrario, inicia persuadiendo, crea en su mente una necesidad de tu producto o servicio y muéstrale las ventajas de tu oferta para que se conviertan en las soluciones de ese problema. Una vez culminada, procura mantener una relación comercial y humana con tus clientes, para que los fidelices y mantengas.
2. Lidera la fase introductoria y de presentación. Antes de vender tu producto o servicio, debes venderte como persona. Acércate a tu cliente, preséntate, encuentra afinidades con él y justifica tu acercamiento. De no lograr esta primera etapa, no podrás pasar a la segunda.
3. Racionaliza el problema o necesidad.Es importante que descubras cual es el problema que aqueja a tu cliente para que de esta manera le des la importancia que amerita la situación y consigas una posible solución.
4. Genera el ambiente y la disponibilidad para escuchar tu solución. Antes de acercarte a un cliente con fines de ventas, mide su disponibilidad de tiempo. Es muy incómodo que una persona ande rápido y lo abordes sin preguntar su disponibilidad. Procura siempre elegir el momento oportuno para abordarlo.
5. Despierta el deseo por tu oferta. Preséntate como un experto ante tu prospecto cliente y genera confianza para que te muestre sus necesidades. Envuélvelo con tu magia, comunícale tu oferta e influye para que te elija.