Siempre es recomendable que al momento de iniciar un negocio propio te enfoques en las cosas que te apasionan de forma que puedas convertirla en tu sustento. Debes pensar en algo que adores hacer, que te haga sentir realizado y te aporte bienestar, algo que te dé satisfacción y que no te cansarías jamás de hacer aunque te dedicaras durante todo el día a ello.
Lamentablemente muchas veces se dejan las pasiones de lado ¡Y eso es un grave error! ¿Sabes por qué? Porque tu pasión está directamente relacionada con tu nivel de felicidad, con tu nivel de paz, tu calidad de tu trabajo.
Es bueno que hagas de tu pasión una forma de vida y encuentres la manera de dedicarte profesionalmente a ella, básicamente, por dos motivos: 1) todos tienen derecho a dedicarse a algo que los haga sentir realizados y 2) cuando más cerca estés de tu pasión más feliz serás y mejor irá todo lo demás.
¿Quieres saber cómo encontrar la manera de convertir tu verdadera pasión en una forma de vida y dedicarte a lo que amas siendo recompensado por ello? te damos pautas para hacerlo.
Meditar te ayuda a encontrar las respuestas
Si unes aquello que amas, con lo que haces bien, lo que el mundo necesita y por lo que te van a pagar, darás con tu propósito y la manera de dedicarte a lo que amas el resto de tu vida mientras haces un bien para los demás.
Meditar ayuda a solucionar problemas, a desconectar los pensamientos, a relajar cuerpo y mente, alejar el estrés, aclara las ideas y despierta todo el potencial que hay en ti. Y si quieres empezar suave y tu primer paso es aprender a meditar exitosamente y conocer las claves de la meditación.
4 Claves para unir pasión, misión, profesión y vocación.
1) Lo que amas.
De eso trata precisamente hacer aquello que amas, y en eso consiste encontrar tu pasión.
Cuando hagas aquello que amas estarás llevando a cabo tu pasión, y cuando conviertas tu pasión en una forma de vida entonces te sentirás verdaderamente realizado y feliz.
2) Lo que haces bien. Tu gran pasión a menudo va ligado a lo que se te da bien hacer… Pero no siempre es así.
Por eso queremos recordarte algo: debes ser bueno en lo que haces. Si tu pasión es la cocina pero cocinar no se te da precisamente bien… será muy difícil que logres ganar dinero vendiendo lo que cocinas a no ser que publiques un libro o busques otros caminos.
3) Lo que el mundo necesita. Piensa en lo que los demás pueden necesitar y cómo tú les podrías ayudar. Hazte esta pregunta: ¿Qué necesidad de las que tienen las personas podrías cubrir?
Ahora se trata de pensar en tu profesión que, por supuesto, debería estar relacionada con tu pasión. Cuando sepas cuál es tu gran pasión y en lo que eres bueno, deberás encontrar lo que la gente necesita y tú les puedas dar.
4) Por lo que te pagarán. Debes tratar de buscar la forma de hacer de lo que amas una forma de trabajar en ello mientras recibes beneficios por algo que adoras.
Piensa cómo podrías convertir esa pasión en una forma de generar dinero. Hay un dicho que dice: “No abandones un sueño por el tiempo que te llevará. El tiempo pasará igual”. ¡Tenlo siempre presente!