¿Qué es el e-learning y cómo se diferencia de otras formas de aprendizaje?

¿Qué es el e-learning y cómo se diferencia de otras formas de aprendizaje?

Se utiliza el término e-Learning para identificar aquellos procesos de enseñanza-aprendizaje diseñados para implementarse a través de plataformas virtuales a las que se puede acceder a través del internet, por lo que generalmente son no presenciales.

Francisco J. García Peñalvo, en su artículo para la Universidad de Salamanca, “Estado actual de los sistemas e-learning” (2005) explica que “Desde la perspectiva de su concepción y desarrollo como herramienta formativa, los sistemas de e-learning tienen una dualidad pedagógica y tecnológica. Pedagógica en cuanto a que estos sistemas no deben ser meros contenedores de información digital, sino que ésta debe ser transmitida de acuerdo a unos modelos y patrones pedagógicamente definidos para afrontar los retos de estos nuevos contextos. Tecnológica en cuanto que todo el proceso de enseñanza-aprendizaje se sustenta en aplicaciones software, principalmente desarrolladas en ambientes web.” Se tratan de dos dimensiones que tienen un alto impacto en el conocimiento adquirido en estos entornos de aprendizaje, ya que requiere no solo la destreza interpretativa y analítica para asimilar los conocimientos del temario sino también de cierta destreza tecnológica, que por igual permita la manipulación exitosa de software, aplicaciones y navegadores para acceder al contenido y tener una participación activa.

En este sentido, las formas de participación dependiendo de su programa, pueden ser tanto sincrónica como asincrónica ajustándose a las necesidades particulares de los participantes. Resulta importante resaltar que el papel del alumno, cambia en cuanto al rol en las metodologías tradicionales pasando a ser el centro del proceso formativo, siendo necesario que, asistido por los recursos de la plataforma o por los facilitadores,  sea capaz de desarrollar de forma autónoma su aprendizaje.Entre las características fundamentales de este tipo de formación se encuentra:

Ubicuidad. Como una referencia a la capacidad de estar en todas partes. Cuando hablamos de ubicuidad en el e-learning hablamos de que se produce en cualquier momento, cualquier lugar y se puede acceder desde cualquier punto. Esto permite precisamente que se potencie, ya que no necesita limitarse a un contexto espacio-temporal.

Flexibilidad. El e-learning ha integrado métodos tradicionales de formación con plataformas virtuales y dispositivos móviles. En este sentido ofrece una mayor flexibilidad al momento de desarrollar las distintas actividades del programa, considerando que se puede acceder al contenido en el momento y lugar que sea más factible para el usuario.

Comunicación. El e-learning plantea una mayor diversidad de formas a través de las cuáles se puede desarrollar una comunicación que le aporte al proceso de aprendizaje. Bien sea a través de correos, foros hasta video llamadas y chats, existen muchas opciones que posibilitan el intercambio con profesores/instructores, así como también con otros compañeros. De este modo, hay más posibilidades de participación e intercambio que permitan hacer el aprendizaje más completo.

Actualización. Algo que caracteriza la era de la información es la inmediatez con la que tenemos acceso a la misma. En este sentido el e-learning lleva la ventaja ya que busca responder precisamente a la necesidad de formación que vaya a tono con los nuevos tiempos. Así mismo, por su estructura, posibilita refrescar los contenidos de forma más rápida, o en su defecto desarrollar discusiones a tono con los avances del día a día.

Empoderamiento del estudiante. Cómo mencionábamos anteriormente el rol del estudiante, que pasa a ser usuario, es de vital importancia. Este debe empoderarse del curso de su aprendizaje no sólo estudiando el temario dado, sino tomando una posición activa en la construcción del nuevo conocimiento, la relación de este con sus intereses y encontrar respuesta a las inquietudes del trayecto. Ante esto, el profesor pasa a ser un facilitador de las herramientas o la información para que este pueda recorrer exitosamente su camino.

Es precisamente en estas características donde radica la diferencia ya que en formas de educación tradicional no existe tal cosa como la ubicuidad, el proceso de enseñanza-aprendizaje se da en un contexto espacio-tiempo específico, por lo que es necesario que tanto el profesor como el estudiante se encuentren presentes. Así mismo, la característica siguiente que hace referencia a la flexibilidad al momento de acceder a los contenidos también es bastante significativa considerando que la enseñanza tradicional apuesta por el trabajo presencial en horarios rígidos. El proceso de actualización de los programas suele darse de forma paulatina, atendiendo a procesos burocráticos y con poca interacción por parte del alumno, que en el e-learning tiene más oportunidades de contribuir al proceso de aprendizaje. Si bien la posición del estudiante respecto a su aprendizaje es una característica fundamental de cualquier proceso formativo, es en el e-learning dónde se ve obligado a tomar las riendas ya que este debe empoderarse de materiales, recursos y herramientas para obtener  un aprendizaje exitoso.

Ahora bien, ¿Cómo trasciende esto al mundo de los negocios?

Para las empresas, el e-learning pasa a formar parte de una estrategia orientada al desarrollo de los talentos, la cualificación de su equipo de trabajo, haciendo posible la consecución de los objetivos y la mejora de los niveles de competitividad. Al integrar el e-learning en las empresas, bien sea para los directivos o para los empleados, debe hacerse focalizado hacia los objetivos de la organización, ajustándolo a las características y viabilidad del negocio. Se trata de una propuesta por la que muchos abogan ya que se encuentra entre las formas más efectivas de actualizar al personal, enriquecer el conocimiento de los que encabezan los procesos que mantendrán a la empresa en marcha sin que se traduzca a largas horas fuera de la empresa.

Se trata de una opción al momento de escoger entre las demás modalidades de procesos de enseñanza-aprendizaje, pero que también puede combinarse con procesos presenciales o semi-presenciales.