La pandemia de la COVID-19 revolucionó todo el mundo, pese a que en estos momentos diferentes países atraviesan por un proceso de recuperación de la economía e implementan estrategias para que las personas puedan retomar su vida cotidiana, lo que sí es seguro es que nada volverá a ser como antes.
Si bien es cierto que el coronavirus ha impactado de manera negativa en la salud, los negocios y la economía, también hay ciertas cosas que agradecer como la digitalización, la flexibilidad y el trabajo remoto.
Dentro de las cosas que hay que agradecer al coronavirus se encuentra aquellas enseñanzas que dejan toda la experiencia durante el confinamiento, a continuación te compartimos algunas lecciones aprendidas poscuarentena:
Transformación digital
Para muchas pequeñas y medianas empresas adaptarse rápidamente al mundo digital fue una carrera de vida o muerte. No obstante, aprendieron que es vital adoptar la tecnología y la digitalización como una mano amiga y parte de la vida empresaria.
Flexibilidad laboral y trabajo colaborativo
El teletrabajo se convirtió en la principal alternativa de las empresas para mantener su operatividad durante la cuarentena y enseñó que los equipos de trabajo no tienen que depender de la presencia física para poder realizar sus tareas laborales y mantener la dinámica de trabajo.
Estrategia basada en objetivos y resultados
En el proceso de desescalada aún muchas pymes luchan por adaptarse a la nueva realidad que amerita enfocar los esfuerzos en el cumplimiento de los objetivos corporativos, los cuales deben ser rediseñados, claros y comunicados de manera efectiva al equipo de trabajo para lograr resultados a corto y mediano plazo.
Importancia de tener un plan de crisis empresarial
La pandemia enseñó la importancia que tiene diseñar un plan de manejo de crisis empresarial. No se debe subestimar el riesgo en todos los niveles de la organización ante una situación de emergencia, ya que de ello depende la supervivencia del negocio.
Presencia online
El cierre de los negocios físicos por la cuarentena dejó una de las más grandes lecciones en el sector empresarial, y es la importancia de que la empresa tenga presencia online. La mayoría de las pymes que no tenían una cuenta en redes sociales tuvieron que introducirse rápidamente en las diferentes plataformas para mantener el contacto con sus clientes y continuar ofreciendo sus productos.
