Entre los gastos fijos de la empresa que cargan considerablemente el monto a pagar cada mes está el costo de la energía. Debido a las alzas en el combustible y otros factores, la energía eléctrica continúa aumentando, obligando a las empresas a ser más conscientes y tomar medidas para gestionar su consumo.
El energy management o gestión del gasto energético es una acción que da respuesta a esta situación, ayudando a las empresas a desplegar acciones e implementar políticas que les permitan gestionar de manera más eficiente su energía y reducir el importe que pagan cada mes en la factura de luz.
Cada vez más pequeñas y medianas empresas se preocupan por reducir sus gastos fijos y aportar al cuidado del medioambiente, generando acciones de responsabilidad social para reducir su huella de carbono en el planeta.
Sin embargo, lo que garantiza que los colaboradores puedan adoptar nuevas medidas en ese sentido es el diseño y comunicación de políticas que permitan implementar el energy management en la pyme. Para ello deben seguir los siguientes cuatro pasos:
1. Auditar el gasto energético: medir el consumo de energía de la empresa y realizar un balance para identificar en cuáles áreas se genera el mayor consumo.
A este paso le sigue el seguimiento. Con la ayuda del internet de las cosas (IoT) se podrán evaluar e identificar las deficiencias en el consumo para incorporar buenas prácticas.
2. Analizar los datos: luego de realizar una auditoría en el gasto energético es necesario analizar estos datos para identificar las áreas que necesitan ser intervenidas para ahorrar en el consumo de energía.
3. Desplegar acciones: una vez que tengas identificadas las áreas donde se genera el mayor consumo de energía, es posible incorporar acciones de energy management para gestionar eficientemente el gasto energético con soluciones como:
– Cambiar las bombillas o luces por LED
– Implementar sensores de luz en las áreas comunes
– Dejar apagados los ordenadores luego de terminar la jornada laboral
– Cambiar a un sistema de climatización más inteligente
– Sustituir los ordenadores obsoletos por unos más actualizados, ya que las nuevas tecnologías suponen un menor gasto de energía.
4. Evaluación y seguimiento: para una mejora continua es imprescindible evaluar y realizar informes sustentados en herramientas que midan el éxito de las acciones implementadas, responder si se alcanzaron los objetivos y mencionar las oportunidades de mejora.
Las pymes que quieren incorporar el energy management en una acción diaria deben tener en cuenta que es un proceso a largo plazo hasta lograr los cambios deseados.
Una manera de dominar las técnicas de gestión de la energía es a través de la norma ISO 50001 sobre el “Sistema de Gestión Energética”, la cual determina los requisitos para implementar el energy management system en la empresa.