El manejo prudente de las finanzas es lo que permite mantenerlo a flote. Sin embargo, a veces sucede que las personas desean emprender un proyecto propio, pero carecen de formación en sus finanzas personales y no saben siquiera cómo manejar y administrar su economía correctamente.
Estudios demuestran que cada vez más las personas piensan en abrir su propia empresa. ‘‘Algún día tendré mi negocio propio’’, esa es una aspiración de muchos. Sin embargo, es importante que esta premisa sirva de motivación para adentrarse en la comprensión de la economía personal y del marco global.
Algunos expertos critican que los nuevos empresarios desarrollen estrategias de ventas, marketing o recursos humanos, idealicen la ejecución del proyecto, y que se olviden de elaborar un verdadero plan financiero que es realmente la base para arrancar.
Por tanto, si piensas insertarte en el mundo de los negocios, Impulsa Popular te aconseja incorporar hábitos financieros oportunos a tu vida, a fin de conducir de manera armónica tus finanzas personales y las de tu negocio.
El primer paso es formarte. Dedica tiempo para tu preparación intelectual en la economía y las finanzas, pues es fundamental comprender de manera práctica el manejo adecuado de los recursos personales y empresariales.
Al igual que otras disciplinas y campos de estudio, esto se logra a base de tiempo, esmero y dedicación.
Empieza a ahorrar porque, en términos generales, un proyecto no dejará ingresos fijos en los primeros meses.
Aprenda a separar el dinero. Es un error común entre los empresarios emergentes mezclar sus finanzas con la de la compañía. Fíjate un salario y no tomes más recursos.
Toma en cuenta las prestaciones laborales. Vacaciones, seguridad social y otras eventualidades ocurren con mayor frecuencia de lo que te imaginas.
Equilibra tus deudas. Tener dominio sobre los compromisos de pago es necesario. No te arriesgues a comprar todo lo que necesitas para tu emprendimiento en la primera. Poco a poco puedes avanzar mientras vayas recibiendo retorno económico.
Otros aspectos a tomar es mantener al día la supervisión de la caja chica. Esto ayudará a tomar conciencia de los ingresos y egresos. Asimismo, mantenerse en comunicación constante con el contador resulta excelente decisión porque en conjunto pueden pasar balance y determinar el estado financiero del proyecto. Tener los pies en la tierra ayudará a planificar estrategias que tu alcance económico te permita ejecutar.
Recuerda el pago de los impuestos e intente establecer una política contra el gasto innecesario.