Las franquicias son una forma de negocio en crecimiento en la República Dominicana y en el mundo porque representan una manera conveniente para que las personas pueden iniciar un negocio.
En este sentido, existe una gran variedad de categorías y compañías que ya han implementado este modelo y de entre ellas se puede escoger una para iniciar un negocio, teniendo en cuenta que existen varios factores que las figuras protagonistas, franquiciado y franquiciante deben tener en cuenta.
De ahí la importancia de definir un acuerdo o contrato que establezca las obligaciones legales y derechos de cada uno, siendo esencial obtener asesoría especializada en materia de franquicias. Algunos puntos a tener en consideración al momento de definir el acuerdo son:
Tiempo. Debe indicarse por cuánto tiempo se otorgará la franquicia y las condiciones para renovar el contrato.
Disposiciones de pago. Existen diversas razones de pago en un acuerdo de esta índole, las más frecuentes más allá del pago inicial son también la tarifa de gestión y la tarifa de publicidad. Debe establecerse cuáles de estas serán aplicables o si se contemplarán otras formas dada la naturaleza del negocio.
Propiedad intelectual. Hace referencia al tipo de uso que ha de darse para con la marca comercial, las patentes, derecho de autor y al uso de los productos y servicios por parte del franquiciante. Así también contempla el manejo de información respecto a las disposiciones de la propiedad intelectual que deben permanecer confidencial.
Suministros. Hace referencia a la procedencia de los suministros para el negocio. En este sentido el acuerdo contempla si el franquiciante debe comprar todos los artículos vendidos por la franquicia al franquiciador así como la maquinaria de producción u otros elementos importantes para mantener los lineamientos de la marca.
Registros contables. Si se ha establecido que se paguen comisiones por gestión, el contrato agregará disposiciones explícitas sobre los trámites contables de la franquicia. El franquiciante debe entonces guardar un conjunto completo de registros, firmas de contadores competentes que auditen la franquicia de manera regular ya que el franquiciador tiene el derecho de inspeccionar las cuentas y ver copias de las facturas/recibos.
Infraestructura. Es importante que se defina el conjunto de medios, servicios e instalaciones de la franquicia de modo que se mantenga alineado con la metodología establecida por el franquiciador. Debe quedar claramente establecido entonces los requisitos particulares de acondicionamiento del espacio, aspectos técnicos para la puesta en marcha, programas informáticos, requisitos o cualificaciones para empleados así como el entrenamiento en el servicio, de ser necesario.
Otras restricciones. Deben ser establecidas también otras restricciones o detalles importantes sobre el manejo futuro de la franquicia, bien sea el proceso en caso de que el franquiciado quiera disponer o vender su franquicia, el interés de compra de un tercero, como también asegurarse que una vez la franquicia haya finalizado, el franquiciante no compita con la franquicia o franquiciador bien sea a través de restricciones geográficas, como otros tiempos establecidos.
Estos aspectos no aseguran totalmente el éxito de la franquicia, pero si dotan de claridad los requisitos y demandas de las partes intervinientes abriendo la posibilidad de una mayor claridad en el manejo de la misma.