¿Alguna vez ha pasado por tu cabeza el pensamiento de no ser lo suficientemente bueno o que las personas a tu alrededor te consideran un excelente profesional con cualidades y habilidades que tú no reconoces en ti mismo? Pues estas voces en tu cabeza se deben al “Síndrome del impostor”.
El síndrome del impostor es un comportamiento que se caracteriza por el sentimiento de no merecer lo que se tiene o lo que se ha logrado y es una situación que afecta, sobre todo, a los emprendedores, sembrando en ellos inseguridad y la incapacidad de reconocer su propio mérito.
Cualquier persona puede sufrir de este síndrome, indistintamente de la ocupación que desempeñe o la edad que tenga. Normalmente suele sucederle a aquellas personas que son muy exigentes con su trabajo y son profesionales de alto rendimiento.
Esta condición psicológica inhibe al emprendedor de su capacidad de asimilar el éxito y a sentirse que no es lo suficientemente bueno y que, por el contrario, es un total fraude, con pensamientos y sentimientos que pueden afectar su autoestima y, por lo tanto, su desempeño.
¿Cómo identificar el síndrome del impostor?
Las personas que padecen el síndrome del impostor suelen presentar algunos de los siguientes síntomas.
• Creer que el éxito que tienen es fruto de la suerte y no debido a su esfuerzo
• Pensar que son un fraude
• Dificultad para recibir reconocimientos y elogios de otras personas
• Inseguridad y desconfianza en sus propias competencias
• No creer que su éxito es el resultado de sus habilidades y sus competencias
• Compararse con los demás
¿Cómo afecta el síndrome del impostor a los emprendedores?
Si como emprendedor padeces del síndrome del impostor esta condición te mantendrá en un círculo vicioso de no sentirte merecedor de tus propios logros, dañando tu autoestima y confianza, dos elementos fundamentales para aquellas personas que impulsan sus propias ideas de negocio.
Pues al perder la confianza en sí mismo nunca considerarás que eres suficiente para lograr cualquier cosa que te propongas y, poco a poco, esto se verá reflejado en tu emprendimiento, generando que al final tu sueño de emprender muera.
Por esta razón, es importante que apenas identifiques que estás padeciendo el síndrome del impostor, busques ayuda para superarlo y aprendas a reconocer tu propio valor.
La mayoría de los expertos recomiendan que aquellas personas que son afectadas por este síndrome ahonden, con ayuda profesional, sobre la raíz del problema que, comúnmente, se basa en autoexigencias a sí mismo. Sin embargo, esta necesidad de perfeccionismo tiene sus raíces en problemas que se encuentran más a fondo, en el subconsciente.
También ayuda hacer una lista de tus fortalezas y enumerar los logros que haz obtenido en los últimos tres años. De esta manera podrás visualizar todo lo que has podido realizar gracias a tu tenacidad, profesionalismo y valentía.
Apóyate en las personas que te rodean para que recibas de ellos una apreciación de las cosas positivas que ven en tí y les inspiras como ejemplo.
Finalmente superar el síndrome del impostor requiere de aceptación de sí mismo. Ámate tal como eres, reconoce tu potencial y acepta con amor todo lo bueno que te da la vida, ya que lo estás experimentando porque te lo mereces.